Se trata de una vivienda unifamiliar de 85 m², ubicada en la localidad balnearia de Monte Hermoso, Buenos Aires, Argentina. El barrio en el que se emplaza presenta un diseño en cuadrícula sobre una topografía de médanos. El lote, con dimensiones de 15 m por 28,10 m, abarca un total de 421,50 m².

La densa forestación de pinos que rodea la propiedad genera una atmósfera de serenidad y tranquilidad. La casa fue concebida para ser utilizada durante estancias cortas de descanso, con una capacidad variable de huéspedes. Construida en hormigón visto, su diseño no solo optimiza el mantenimiento económico, sino que también se considera que su color y textura crearán un diálogo armónico con el entorno natural del lugar.

Debido a la topografía de médanos del área, el acceso a la vivienda se realiza mediante una escalinata que se vincula estrechamente con el espacio destinado a la llegada y estacionamiento de los vehículos.

En cuanto al área social, esta se pensó como el espacio central de la casa: amplio, luminoso, integrado y perfectamente conectado con el exterior. El área privada se compone de dos dormitorios lo más independientes posible entre sí, cada uno con su propio baño, y ambos con acceso al exterior.

Este último espacio se extiende hacia un gran deck de madera, que establece una conexión directa con la piscina y el acceso. La parrilla y la regadera exterior, a su vez, delimitan y organizan los diferentes espacios dentro de la misma superficie.

El tiempo estimado para la ejecución de la obra es de 8 meses.